Despegue corto

¡Buenos días amigos! ¡Que sábado tan increíble! Y así, para rematarlo, se me ha ocurrido que hoy voy a hablaros de los despegues cortos.

Pero antes de hablaros de los despegues cortos, tengo que hablaros del EFECTO SUELO ¿Que qué es esto? Pues ya hablamos de cómo se produce la sustentación, que debido al efecto embudo que hace el ala con el aire que surca, forma una corriente descendiente, una corriente que al salir del ala empuja el aire circundante de arriba hacia abajo, empuje que teniendo en cuanta la tercera ley del movimiento de Newton le es devuelta con la misma fuerza en sentido contrario. Pues bien, si esta corriente, en vez de apoyarse sobre otro aire, el avión se encuentra cerca del suelo y se apoya sobre tierra, la sustentación pasa a tener una efectividad mucho mayor, reduciéndose entre un 10% y un 45% la resistencia inducida (Cuando más cerca del suelo esté el ala mayor reducción de la resistencia), ¡Pero ojo! Que esta reducción de la resistencia que llamamos efecto suelo sólo se empieza a producir a alturas inferiores a una envergadura del ala, osea que si la envergadura de un avión es de 4 metros, este efecto empieza a los 4 metros y aumenta según desciende el avión hasta que toca el suelo.

 Avión realizando un vuelo rasante aprovechando el efecto suelo

Gaviota utilizando el efecto suelo, lo que le permite volar empleando menos esfuerzo

Seguro que pensaréis que este efecto es la leche y que solo puede ser positivo dado que si se reduce la resistencia, también se reducirá la velocidad y empuje que necesita el avión para mantenerse en el aire, y si esto es cierto, esta es la parte positiva, precisamente esto nos permite realizar un despegue corto. El despegue corto se utiliza sobre todo en avión general y más aún en la ultraligera, y es muy práctico no sólo en pistas cortas, si no también a veces que se aterriza en pistas no preparadas, pistas de césped, zonas de tierra o de incluso arena, en las cuales el avión tendría muy difícil alcanzar la velocidad de rotación. Para realizar un despegue corto primero ponemos todo el flap posible, frenamos el avión y aumentamos el empuje al máximo. Una vez tenemos las máximas revoluciones, soltaremos los frenos y tiraremos de la palanca de control hacia atrás sin esperar a la velocidad de rotación para que el avión rote en cuanto pueda, y veréis como rota antes de lo que lo hacemos normalmente, pero justo en cuanto el avión se levante del suelo, es crucial para no matarnos picar y mantener un vuelo rasante permaneciendo en la zona de efecto suelo hasta reducir flap y alcanzar la velocidad de rotación, siguiendo desde entonces el procedimiento habitual de ascenso.

Estoy seguro que os preguntaréis ahora, que si el avión puede rotar antes, por qué no se hace así siempre. Pues muy fácil, todos los cálculos se hacen sin tener en cuenta el efecto suelo, porque cuando el avión abandona esa altura de una envergadura del ala pierde sus propiedades, con lo que ello conlleva, por eso hay que acelerar el avión en vuelo rasante antes de ascender, porque si ascendemos directamente el avión al salir del efecto suelo se desplomaría, y eso justo fue lo que le pasó al avión de Spanair en Barajas, y ese es precisamente la parte negativa del efecto suelo, que ese avión en concreto no estaba configurado para el despegue, pero debido al efecto suelo despegó como si tuviese el flap adecuado, y una vez abandonó la zona de efecto suelo, se desplomó, por eso el efecto suelo es peligroso, porque si no se utiliza con conocimiento te lleva a creer cuando el avión no está adecuadamente configurado para despegar que si lo está con el peligro que comporta, pero sin embargo, bien utilizado, te permite despegar de cualquier sitio. ¿Y por qué no se despega siempre así, en despegue corto? Porque fuerza el motor mucho más que un despegue normal, a parte de que se consume más combustible, tarda más el avión en despegar, requiere más habilidad y es mucho más delicado, pero siempre es útil saber como hacerlo por si hiciese falta.

Avión de diseño STOL (Short take off and landing),cuya misión es poder realizar despegues y aterrizajes cortos.

Mi experiencia personal en cuanto a despegues cortos se reduce sólo a los ultraligeros, en concreto al trike y al FK9 ELA. Con el trike hice varios y fue alucinante, uno en particular que recuerdo con mucho cariño lo hice en la pista cruzada del aeródromo de Villacastín, aeródromo cuyas pistas son de hierva, pero ésta en concreto estaba sin preparar, con tojos y todo, pero pudimos despegar sin problemas mediante el procedimiento de despegue corto, solo que acabamos con un montón de plantas enganchadas al tren de aterrizaje, pero es de las mejores experiencias de pilotaje que he tenido sin duda ¡Fue alucinante!.

Como curiosidad, los rusos en los años 50 diseñaron un tipo de hidroavión que volaba gracias al efecto suelo (Su altitud máxima operativa eran unos 500 metros, unos 1.600 pies aproximadamente)cuyo objetivo era emplear su velocidad y baja detectabilidad para mediante misiles de crucero atacar una flota enemiga en el mar, pero no llegó a buen puerto y nunca se llegó a emplear en combate. Los Estados Unidos estaban evaluando su utilidad como aeronave de desembarco en playas, pero no se si al final habrá salido a delante, desde luego parece que aún no hay prototipos.

Ekranoplano en vuelo rasante

Con los despegues cortos me despido hoy de vosotros, espero que lo hayáis disfrutado ¡Buenos vuelos!.